EL EJÉRCITO DORADO

UN CROSSOVER PARA COMENZAR LAS JORNADAS WARHAMMERAS

Se dice, que desde los inicios del tiempo, el hombre, la bestia y todos los seres mágicos vivían en paz sobre el planeta.

Pero el hombre había sido creado con un gran agujero en el alma. Un agujero que no podía llenar la riqueza, el poder o el conocimiento. Y en su infinita avaricia, el hombre soñaba con expandir su dominio por todo el planeta.

Muchos elfos, ogros y goblins derramaron su sangre en la lucha contra el hombre y el Rey Balor, el Rey Manco de la tierra de los elfos contempló la masacre con horros y desesperación.

Pero un día, el maestro herrero de los goblins le ofreció al Rey forjarle un ejército dorado de soldados mecánicos, setenta veces setenta guerreros que no conocerían el hambre ni la derrota.

El príncipe Nuada le suplicó a su padre que accediera: Fórjame ese ejército, dijo el Rey.

Entonces se forjó una corona mágica que permitiría a todos los de sangre real dirigir al Ejército Dorado si su poder no era cuestionado: Yo soy el Rey Balor, general del Ejército Dorado, ¿hay alguien que cuestione mi derecho?

En el salón del trono, nadie lo desafió.

…

Entonces el mundo cambió, y cuando los humanos volvieron a marchar sintieron temblar la tierra bajo sus pies y vieron el cielo oscurecerse con monstruosas figuras.

El Ejército Dorado no tenía piedad. No sentía ninguna lealtad o dolor, y el corazón del Rey Balor se llenó de arrepentimiento. Así que llamó a una tregua y dividió la corona en tres fragmentos,  una para los humanos y dos para sí mismo. A cambio, el hombre se limitaría a las ciudades y los seres mágicos habitarían los bosques. Esta tregua se respetaría por sus hijos, y por los hijos de los hijos a través del tiempo.

Pero el Príncipe Nuada no creía en las promesas del hombre. Se cuenta que se marchó al exilio jurando regresar el día que más lo necesitara.

El ejército dorado permaneció dormido, encerrado en las entrañas del planeta, esperando… Y ahí sigue hasta la fecha, aguardando que la corona esté completa otra vez: Silencioso, quieto e indestructible.

Este es el inicio de “Hellboy 2: el Ejército Dorado”, con esa ambientación de modelos anatómicos de madera que personalmente me encanta.

A partir de aquí la historia evoluciona hasta nuestro crossover Warhammer 40.000 y Hellboy. El Príncipe Nuada recupera el fragmento de la corona otorgado a los humanos y regresa del exilio para usurpar el trono de su padre y alzar al Ejército Dorado.

Con setenta veces setenta guerreros inmortales bajo su mando y su comitiva de elfos (en este caso eldar), ogros y goblins (entendidos como duendes), el Príncipe Nuada marcha sobre las ciudades para destruir la civilización del hombre.

Pero los humanos no están indefensos, una sección inquisitorial conocida como la Agencia de Investigación de Casos Paranormales ha enviado a su mejor agente y a las mejores tropas de choque que ha podido reunir para enfrentarse al Ejército Dorado.

MISIÓN: Asegurar el Control (1d3+2 objetivos)

DESPLIEGUE: Punta de Lanza

PUNTOS POR BANDO: 1800 Lobos Espaciales + Hellboy vs 1250 Necrones + 550 Eldar Oscuros + Príncipe Nuada

1800 puntos de Lobos Espaciales

 +

Hellboy

Hellboy: Capitán de los marines espaciales con puño de combate, la Samaritana (pistola de plasma), Amuleto de San Malaquías (armamento digital), bólter, granadas de fragmentación y perforantes, bombas de fusión y servoarmadura.  

Reglas Especiales: No conocerán el miedo, Ritos de combate y Personaje Independiente.

El Ejército Dorado (1250 puntos de Necrones)

 +

Séquito de seres Mágicos (550 puntos de eldar oscuros)

 +

Príncipe Nuada

Príncipe Nuada: Arconte Eldar Oscuro con lanzagranadas fantasma, armadura fantasma, espada fantasma, psicofármacos de combate y espiral de sombras.

Reglas Especiales: Visión Nocturna, Poder del Dolor, Veloces y Personaje  Independiente